El presidente Andrés Manuel López Obrador anunció el día de ayer, que desde el momento que tomó protesta como titular del ejecutivo federal a la fecha, se ha incrementado un 50% el presupuesto a los estados y municipios, incluyendo Tlaxcala; y que además, la entrega de estos recursos es puntual como nunca antes, “se les deposita de manera anticipada para que no haya pretexto de No cumplir con el pueblo bajo el cuento de que no reciben dinero,” señaló el mandatario.
Excusa que ha utilizado el gobierno lorenista, desde hace unos meses para no brindar apoyo a las campesinas y campesinos tlaxcaltecas, que demandan mayor apoyo por las severas afectaciones a cultivos derivadas de las condiciones climatológicas.
Ante la falta de sensibilidad y del incumplimiento de otorgar atención a las demandas del sector campesino, en días pasados, productores de diferentes puntos de la entidad se manifestaron frente a palacio de gobierno dónde exigieron a la gobernadora Lorena Cuellar Cisneros, liberar apoyos para mitigar los daños catastróficos que sufren campesinos y productores agrícolas, ante los efectos de la sequía y las heladas, además, instaron a establecer una mesa de diálogo, sin embargo, la única respuesta que obtuvieron fueron agresiones y golpes por parte de elementos policiacos de la entidad.
La demanda y el caso omiso de la gobernadora Lorena Cuellar continúa generando un clima de inestabilidad para el campo tlaxcalteca, pues aunado al trato violento de los elementos de seguridad pública que agredieron a varios campesinos inconformes, en sus justas demandas, es notable la incompetencia del gobierno actual para resolver dichas problemáticas, dando por entendido que es una indicación actuar con represión y no el diálogo.
Ante la terrible situación del gobierno de Tlaxcala, diversas agrupaciones han buscado otros canales, e incluso a legisladores federales para solicitar el respaldo y se liberen los recursos que se encuentran en las arcas del gobierno Lorenista.
Finalmente, es notorio que el gobierno actual de Tlaxcala está manejando una política contraria o antagónica al modelo humanista mexicano de la Cuarta Transformación, que impulsa el presidente Andrés Manuel López Obrador.