“Han pasado quinientos años desde el encuentro de los tlaxcaltecas con los españoles, los mismos de olvido y abandono”: Ana Lilia Rivera Rivera.
La servidora pública y representante del Estado de Tlaxcala ante el Senado de la República, Ana Lilia Rivera Rivera, mantuvo en los días pasados una reunión con el actual Director General del Instituto Nacional de los Pueblos Indígenas (INPI), Adelfo Regino Montes, a fin de analizar y discutir las principales problemáticas que afrontan los pueblos originarios del Tlaxcala.
Durante este encuentro previo al diálogo convocado por el presidente Andrés Manuel López Obrador el próximo viernes 3 de enero en el municipio de San Pablo del Monte, la senadora manifestó que un primer paso para la consecución de un diseño institucional que provea soluciones, es conocer a fondo las realidades y aspiraciones de vida de los pueblos originarios de Tlaxcala. Ante esta situación, la senadora originaria de Calpulalpan no ha desestimado la lucha social impulsada por las y los indígenas del Estado de Tlaxcala, pues fue junto a ellos, cuando comenzó su carrera política para la búsqueda de alternativas de este sector social.
Incluso, fue hace un año cuando la senadora se reunió por primera vez con Adelfo Regino Montes con el objeto de exponerle la necesidad de contar con una coordinación estatal del INPI en Tlaxcala; toda vez, de acuerdo con la legisladora, que los pueblos indígenas nahuas y otomíes representan cerca del 2.6% de la población tlaxcalteca. A su vez, en aquella ocasión, Rivera Rivera aseveró lo importante de contar con una institución de representación indígena debido a que éstos han sido “injustamente olvidados por el gobierno federal, estatal y municipal”, hasta el grado “de negar que Tlaxcala es un Estado indígena”.
De esta manera aseguró que como representante y proveniente del sector rural de Tlaxcala, impulso desde el Senado de la República y desde el Gobierno Federal la concesión de acuerdos y propuestas que serán próximamente planteadas al presidente para reivindicar a los pueblos originarios del país, en dónde Tlaxcala es un gran referente en cuanto a su cultura y a su diversidad de tradiciones.
Asimismo, recalcó que seguirá defendiendo desde el poder legislativo, y desde las instancias en la que esté facultada para participar, la libertad, la legitimidad y los intereses de los pueblos originarios puesto que “la sociedad tiene una deuda histórica hacia con ellos”.