Pobladores de Huactzinco ponen un alto a su alcalde por la construcción de la explanada parroquial

Pobladores de Huactzinco, pusieron alto al alcalde Antonio Robles Pineda y a la obra de construcción de una explanada parroquial, tras ser acusado de despojo, además de reclamar al párroco de no defender los bienes y propiedades de la iglesia.
En medio de la noche cuando el alcalde de Huactzinco Antonio Robles Pineda, en su intento de arrancar la obra de la explanada parroquial en esa comuna, los pobladores “repicaron las campanas” para salir de sus casas y a la vieja usanza de agitación sin entendimiento impidieron que continuara este acto, donde el munícipe tras la necedad de los quejosos huyó molesto.
El polémico alcalde comenzó con conflictos no sólo con los pobladores de su comuna, sino con los mismos representantes de la fe católica.
Los actos de despojo a la iglesia los acarrea desde julio de 2014, cuando intentó quitar a la grey católica un terreno para construir la Unidad Básica de Rehabilitación (UBR) y un teatro al aire libre, donde la los representantes eclesiásticos reclamaron la propiedad y se negaron a la realización de estos proyectos.
Un año después, este mismo hecho de despojo se repite con este alcalde Robles Pineda, a quien los mismos pobladores le han puesto un alto a sus intentos de apropiarse de bienes eclesiásticos a pesar de ser apoyado del obispo Francisco Moreno Barrón.
De esta forma, un centenar de pobladores de San Juan Huactzinco reclamaron al alcalde priista el despojo a la comuna de los bienes de la iglesia, por tanto también reclamaron al párroco y fiscal mayor de no defenderlos y ser cómplices del munícipe al estar presentes en el banderazo de salida a esta obra para tomarse la foto y quedar bien.
Los inconformes acusaron tanto al alcalde Antonio Robles Pineda y sus funcionarios, como de la iglesia, de no tomar el parecer de la población ya que el predio en el cual se proyecta la construcción de lo que será la plaza principal llamada “Plaza Parroquial” para obtener el permiso del párroco, pertenece a la iglesia y no al sacerdote.
Con estas discusiones, que por momentos se tornaron de afrenta política contra la administración actual, transcurrió al tiempo que los pobladores “repicaban las campanas” para llamar a la población a concentrarse y con un altavoz en mano, uno de los manifestantes gritaba “no se dejen burlar por Antonio Robles”.
Este hecho fue alrededor de las 10 de la noche de este miércoles 21 de octubre, cuando el alcalde priista se presentó al lugar donde se construiría esta explanada principal y donde fue confrontado verbalmente por los pobladores de San Juan Huactzinco quienes le gritaron consignas.
Y donde el priista expuso, “yo no me atrevería a construir sino hubiera una autorización de quien es el representante legal, que en este caso conforme a la Ley es el Párroco de la Iglesia, el predio está como un anexo de la Parroquia y aunque lo ceda el pueblo lo representa la Diócesis del Estado”, reclamó confrontándolos.
Así, se justificó “para que pudiéramos ejecutar estos recursos que ya están etiquetados desde hace mucho tiempo, nosotros no actuamos de manera arbitraria, se tuvieron varias reuniones con los demás fiscales, incluso con el padre, con quien posteriormente nos trasladamos para hablar con el Obispo, quien nos canalizó con el jurídico para suscribir un convenio en donde a la administración municipal se le permite sólo ejecutar el recurso como gestor en propiedad de la iglesia”, sostuvo al referir que este bien público no le pertenece y sólo invertiría recursos federales.

Además agregó, “pare ello el Obispo puso como condición que la obra llevará el nombre de “Explanada Parroquial”, lo que va a quedar plasmado incluso en piedra, ese fue el primer acuerdo que convine con el jurídico”, expuso al dar a conocer que el mismo obispo Francisco Moreno Barrón, condicionó ceder estos terrenos con el beneficio de una placa conmemorativa.

“El segundo compromiso lo adquirimos junto con la Síndico, para lo cual se suscribió otro convenio, pidiendo previamente la autorización al Congreso de Estado, nosotros vamos a ceder toda esta parte de estos predios nuevamente a la Iglesia, sólo vamos a esperar que se den los tiempos legales para ello”, expuso.

Finalmente, el alcalde priista Antonio Robles Pineda, al intentar imponer su voluntad ante los pobladores donde sólo logró el rechazó, por lo que los confrontó diciendo que cien personas no deciden sobre un pueblo y que acataría la decisión de toda la población y al tiempo de no verse apoyado molesto huyo del lugar.