Representantes de diversos colectivos feministas y defensoras de los derechos humanos levantaron la voz contra lo que calificaron como una campaña de intimidación en el estado, días previos a la marcha para conmemorar el Día Internacional de la Mujer.
Responsabilizan al Gobierno local, encabezado por la gobernadora, Lorena Cuéllar Cisneros, así como a personajes con vínculos familiares con funcionarios públicos.
Yeny Charrez, activista, detalló que mujeres del estado han recibido mensajes tanto telefónicos como en redes sociales, cuestionándoles sobre su postura respecto a la realización de pintas en monumentos históricos por parte de algunas participantes en la marcha.
Además, se les pregunta si respaldan las medidas tomadas por el Gobierno local para proteger los edificios históricos y controlar la participación de mujeres en la marcha, con la fuerza pública.
Charrez subrayó que esta campaña busca promover el odio hacia las mujeres que participan en la marcha del 8M, criminalizándolas para justificar una posible represión como lo ha hecho en los últimos años el gobierno local, durante las conmemoraciones del Día Internacional de la Mujer.
«Son mensajes cargados de odio, intentando cuestionar el papel de las mujeres en las luchas. Es increíble que aún se cuestione el derecho de las mujeres a manifestarse», señaló la activista.
Charrez también mencionó que Javier Zamora, presidente de la Cámara Nacional de Industria y Alimentos Condimentados (Canirac) en Tlaxcala, quien tiene vínculos familiares con la secretaria de Turismo, presentó una solicitud a la Secretaría de Gobierno para la protección de los monumentos históricos y garantías de seguridad para los ciudadanos durante la marcha de mujeres.
«Insisto, esto es para justificar el uso de la fuerza pública. No solicitan protección para las mujeres, pero sí para los monumentos», acotó.
Por este motivo, la activista explicó que los colectivos feministas han lanzado la campaña #MarchaSinMiedo en las horas previas a la marcha, utilizando canales digitales, con el objetivo de convocar a mujeres de diversos sectores sociales a unirse al movimiento en defensa de los derechos de la población femenina.
Finalmente, aseguró que ellas «no se desligan» de la marcha, ya que participarán de manera pacífica en su propio contingente, aunque reconoció que en el movimiento participan diversos grupos de mujeres que ejercen su derecho a la manifestación de manera independiente.